Dónde comer la mejor cheesecake de Nueva York

El mejor cheesecake de Nueva York se consigue en Junior’s. Al menos, eso creen las críticas de The Wall Street Journal y New Yorker, y los paladares de Barack Obama y Bill Clinton.

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Por Ariel Ferrero (Diario PERFIL)

Así como en Buenos Aires los turistas buscan alfajores, en Nápoles la pizza y en Londres la cerveza, en Nueva York se vuelve casi indispensable probar la cheesecake. No porque los neoyorquinos hayan sido los inventores de esta delicia (que se remonta a los griegos hace 4 mil años), sino porque se elaboran allí –sin dudas– las mejores. Y en este podio, el restaurante Junior’s ostenta desde hace 66 años el primer lugar.

La fórmula mágica de la cheesecake (con la justa consistencia del queso, sin grumos y en una cocción perfecta) que sirve Junior’s fue elaborada por Harry Rosen, luego de experimentar con el Philadelphia Cream Cheese, crema, huevos frescos y vainilla. Al principio, y hoy también, batiendo a mano, como hacían nuestras abuelas. “Se trata de la misma manera en que hacemos pasteles de queso en la actualidad”, subrayó una fuente del restaurante, que está situado en el corazón de Times Square, en Manhattan.

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El primer Junior’s, el original, fue inaugurado en Brooklyn el día de las elecciones de 1950, con su marquesina decorada con los colores de la bandera estadounidense: rojo, blanco y azul. Harry Rosen eligió el nombre del restaurante en honor a sus dos hijos, uno de los cuales todavía trabaja en Brooklyn. ¿Pero quién dice que la cheesecake de Junior’s es la mejor de Estados Unidos? El Wall Street Journal, entre otros, la calificó como “La mejor cheesecake” en 2006. También la revista New Yorker, en 1973, la había ubicado como la #1 de la ciudad.

Pero fueron los ciudadanos comunes y los turistas quienes dieron y siguen dando su veredicto cada día. Para el cineasta Mel Brooks, creador de Get Smart (El Súper Agente 86), la cheesecake de Junior’shace que tu boca quiera celebrar una fiesta para tu lengua”. En el mundo de la política, desde los presidentes Barack Obama y Bill Clinton hasta los alcaldes Rudy Giuliano y Michael Bloomberg se detuvieron a saborear la torta de queso.

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Una noche de 1992, en medio de su campaña presidencial, el ex presidente Bill Clinton se detuvo a comer en Junior’s. Esa noche ordenó pastrami, cheesecake y diet-coke. Lo mismo hizo Obama en 2013. Durante un viaje por Nueva York, se detuvo para llevarse dos tortas enteras, para saborear en el Air Force One, de camino a casa. Además, compró cookies por US$ 73 para sus hijas Sasha y Malia. Lo acompañaba el demócrata Bill de Blasio, actual alcalde de Nueva York, en ese momento en plena campaña electoral por el cargo. Y se retiró luego de saludar por las mesas a varios comensales.

Como en el cine, en Junior’s también ocurrieron historias de amor. Una pareja se comprometió enfrente del local de Brooklyn. El novio le compró a su prometida una porción de cheesecake, pero le advirtió: “Masticá despacio, porque dentro del queso está el anillo de compromiso”. El 10 de marzo de 1999, el alcalde Giuliani decidió que la intersección de las avenidas Flatbush y DeKalb, el sitio del restaurante original de Junior’s, fuera renombrada Harry Rosen Way – Cheesecake Corner. Imaginativos.

LO BÁSICO. Junior’s tiene cuatro restaurantes: el original en Brooklyn (en la esquina de las avenidas flatbush y DeKalb); otro en Grand Central terminal; uno más en times square (45th street entre Broadway y la 8º avenida); y en foxwoods Casino, Connecticut. -Junior’s vende un millón de cheesecakes por año en todas sus sucursales. -los más pedidos son el ’Plain’ (simple) y el de frambuesa.

 

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