En el corazón del NOA, cada primavera la capital provincial se transforma en un ramo de lapachos rosados y chañares amarillos. Intensa, no perdió el romanticismo de los parques y el pasado histórico. El Parque 9 de Julio ansía ser reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Se puede pasear en catamarán o tomar la aerosilla para tener la panorámica desde el aire.

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