Las casi perfectas Islas Seychelles constituyen el típico destino al que se viaja solamente si uno gana la lotería. De estas 115 islas, 41 islas interiores constituyen las islas graníticas de océano más antiguas de la tierra. Mientras que otras 74 forman los 5 grupos de atolones de coral de arrecifes e islotes que se encuentran las islas periféricas. Una vez allí, el plan perfecto es alquilar un lujoso yate o un velero (180.000 euros por semana) y navegar por las aguas cristalinas de este paraíso. Seychelles es el hogar de al menos dos sitios declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: el legendario Valle de Mai en Praslin donde crece el «Coco de Mer» o Coco Doble y la legendaria Aldabra, el atolón coralino más grande del mundo visto por primera vez a principios del siglo XIX por marinos árabes. Grand Anse, Anse Source d’Argent (también en La Digue), Anse Lazio (en la isla de Praslin) y Beau Vallon (en Mahé) son sólo algunas de las playas más célebres de Seychelles. Para gozar de estos serenos placeres, la oferta hotelera y de casas de huéspedes es variada, desde unos 70 euros la habitación doble. En el extremo opuesto se sitúan exclusivos resorts-isla, como el de North Island, donde una noche cuesta 1.095 euros por persona. Foto: AFP