Antiguamente los cafés parisinos eran conocidos por ser, especialmente, los pintorescos escenarios donde grandes pensadores, escritores y aristas se relajaban y socializaban en un escenario casi mágico. Pero ahora, gracias al joven empresario Margaux Gandelon, los cafés de la “Ciudad Luz” pueden llegar a ser más conocidos por tener como protagonistas algo totalmente distinto: los gatos. En “Le Café Des Chats” , ubicado en el barrio de Marais, hay gatos que se pasean libremente, dispuestos a ser acariciados y mimados por los clientes. Este concepto es muy popular en Japón, donde los “Cafés gato” o “Neko cafés“, como se les conoce allí, permiten a los clientes tomar algo mientras acarician a los gatos. Esta idea se ha extendido recientemente en Europa; como Londres (el “Lady Dinahs”), Viena (el “Cat Café”) y próximamente abrirá uno en Madrid. Foto: AFP