Fue en 1960 cuando RÃo de Janeiro cedió la capitalidad de Brasil en favor de la recién inaugurada Brasilia, una ciudad surgida de la selva y proyectada para albergar las grandes instituciones del Estado. Su principal arquitecto, Oscar Niemeyer, y el urbanista Lúcio Costa, crearon una de las capitales más jóvenes y modernas del mundo, merecedora a las pocas décadas de su nacimiento de la catalogación de la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
30/04/2014. Volver a la nota: FotogalerÃa | Buenas excusas para ir a Brasil más allá del Mundial




