Ciento veintiuna hectáreas de esa ciudad, en el estado de Virginia, son un museo del 1700 al aire libre. Carruajes de alquiler, pelucas blancas y miriñaques en una puesta en escena de aquellos años en que se libraron los primeros fuegos de la Independencia. Fotos: Cedoc Perfil

Volver a la nota: Los encantadores aires coloniales de Williamsburg

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

cuatro × tres =