Este principado no puede competir con la cosmopolita Dubai, pero fue visitado por 800.000 turistas en 2012. Galería de fotos.

Kelly tiene exceso de peso. Pero Kelly no es un ser humano que tenga que preocuparse por sus michelines. Kelly es un halcón y sólo tiene un sobrepeso de 112 gramos. No obstante, el cuidador de animales Mitch está preocupado. Kelly debe ir a un entrenamiento de vuelo, y cuando los halcones pesan demasiado, es decir, cuando están llenos, muchas veces les gusta escapar durante el vuelo. «El único motivo por el cual las aves vuelven hacia mí es la comida«, explica Mitch. Por ello, siempre pesa a las aves antes de que emprendan el vuelo. Para evitar que se pierdan se les coloca un dispositivo localizador.

Kelly es una de las atracciones principales del hotel «Banyan Tree al Wadi», que está situado en medio del desierto del emirato de Ras al Jaimah. Un entorno perfecto para los ejercicios de vuelo de la joven hembra de halcón. A los visitantes se les invita a observar los vuelos.

Mitch ha atado a una cuerda un cebo hecho de plumas que hace girar por el aire. Kelly hace sus vueltas en el cielo. De repente se lanza en picado sobre el cebo. «¡Bajen la cabeza!», advierte Mitch a los visitantes. En el último momento, el cuidador de animales retira la cuerda. Kelly toma vuelo nuevamente. El ejercicio se repite un par de veces. Luego, Kelly recibe como recompensa su comida.

Los halcones tienen una larga tradición en los países de la Península Arábiga, especialmente en RAK, tal como los habitantes llaman a su emirato situado al norte de Dubai. Originalmente, las aves se utilizaban para la caza. «Hoy en día sólo es un deporte«, dice Mitch. Un deporte muy caro, ya que los amantes de estas aves pagan hasta medio millón de euros (casi 700.000 dólares) por ejemplares particularmente bonitos. Los animales reciben cuidados especiales, incluso tienen pasaportes y, cuando van de viaje, reciben un asiento propio en el avión.

Snowflake es un halcón que llegó a valer 60.000 dólares. «Ahora, quizás no valga más que diez dólares«, dice Mitch riéndose. Snowflake (copo de nieve en español) está jubilado y Mitch diariamente le da caricias. Con amor acaricia las garras del ave. En cambio, los demás halcones y azores son sacados de sus jaulas para que puedan realizar al menos un vuelo diario.

Google y Yahoo ya hicieron sus vuelos en la mañana. ¿A quién se le ocurrieron esos nombres? «Eso fue idea mía«, dice Mitch. Y es que actualmente en el desierto árabe hay dos búhos del desierto traídos de Silicon Valley. Sin embargo, quien cree que estos dos pájaros son especialmente listos se equivoca. «Son bastante tontos. En realidad, sólo piensan en la comida y en dormitar«, señala Mitch.

A los visitantes les dan guantes protectores. Tan pronto como se dan cuenta de que los guantes esconden partes despedazadas de codornices, los pájaros vuelan hacia los visitantes, que se asustan. La mayoría de ellos nunca antes habían tenido en la mano un pájaro tan grande. A lo mejor algunos tenían alguna vez en casa un periquito, pero nunca un búho del desierto, que al menos es diez veces más grande. Unos segundos más tarde el miedo desaparece y los visitantes incluso tienen permiso para acariciar a los pájaros.

El «Banyan Tree al Wadi» es uno de los proyectos turísticos piloto del emirato de Ras al Jaimah, que por lo demás no tiene una infraestructura turística especial. «Todavía no», subraya la gerente de relaciones públicas, Nermin Abushnaf. El número de lugares de interés turístico se puede contar con los dedos de una mano.

Situada en un cerro, la vieja fortaleza Dhaya, construida en el siglo XVI para dar protección frente a los conquistadores británicos, ofrece una vista panorámica bonita. Sin embargo, esta atracción por sí sola difícilmente atrae a un turista a RAK, ni tampoco el museo ubicado en una carretera alta de la costa, que permite conocer la segunda tradición del emirato, después del show de los halcones: las perlas. En las dos plantas del museo los visitantes pueden informarse de cómo en el pasado se tenía que bucear para sacar las perlas y cómo éstas se recogen en la actualidad.

«Un emirato emergente» es el lema que RAK se ha dado a sí mismo. Y efectivamente, están pasando muchas cosas en el emirato. «Si usted viene la próxima vez…», le gusta repetir a Abushnaf. Por todos lados se observan actividades de construcción. Seguramente, pronto se sumarán más hoteles a los 15 con que cuenta el emirato actualmente. También está prevista para el futuro cercano una excursión hacia las granjas de perlas.

El emirato no pretende competir con Dubai, lo que tampoco podría hacer. «Nosotros apostamos por actividades en la naturaleza y por las playas«, explica Abushnaf. El emirato tiene 46 kilómetros de playas de arena, además de montañas, el desierto y la naturaleza.

Entre enero y septiembre de 2012, el emirato fue visitado por 800.000 turistas. RAK quiere ofrecer a los visitantes lujo, aunque no demasiado caro, para marcar otro contraste con Dubai. Dejando de lado los hoteles, en todo el emirato sólo hay un restaurante que cumple los estándares europeos, pero los planes prevén que esto cambie pronto.

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INFORMACIÓN BÁSICA

• Cómo llegar: Ras al Jaimah cuenta con un aeropuerto propio para vuelos chárter. Hay muchos vuelos regulares a Dubai, desde donde se puede llegar al emirato recorriendo sólo unos 80 kilómetros.
• Cuándo viajar: Los meses de verano, de mayo a octubre, son extremadamente calurosos, con temperaturas de hasta 50 grados centígrados. Los meses de invierno son más agradables. El show de Halcones comienza todos los días a las 16:00 horas en el hotel «Banyan Tree al Wadi», que está situado a unos 30 kilómetros del centro de la ciudad de Ras al Jaimah.
• En la web: Turismo de Ras al Jaimah (http://www.rasalkhaimahtourism.com)