De isla en isla por Escocia, donde la naturaleza aún es salvaje
Un crucero permite recorrer las islas más hermosas de esta región cuyo lema es «Keep the nature wild» (Mantenga la naturaleza en estado salvaje).
Castillo de Brodick en la isla de Arran. Foto: dpa [ Ver fotogalería ]
El mar está bravo. Las nubes están bajas. La fuerza del viento es de 5,7 nudos. «Ningún problema. Cada día es diferente«, dice John MacLeod, tercer oficial del transbordador de la compañía Caledonian MacBrayne. El hombre sabe de qué está hablando. Cinco veces al día viaja de la Escocia continental a la isla de Arran (Escocia), siete veces por semana, con hasta 1.000 pasajeros y 100 coches a bordo: este es su mundo.
Al día siguiente, el sol brilla y no hace viento. «Tengan cuidado. El tiempo puede cambiar bruscamente«, advierte Corinna Göckerotz a los turistas aventureros que desde Brodick Castle se dirigen al Goatfell, con 874 metros el pico más alto de la isla. La alemana llegó hace nueve años a esta región para trabajar para la National Trust for Scotland (Asociación Nacional para Escocia), cuyo lema dice así :«Keep the nature wild» (Mantenga la naturaleza en estado salvaje).
Por esto, la asociación prefiere dar a los caminantes un mapa detallado y, de ser necesario, también una brújula en vez de atraer a demasiados turistas, que a lo mejor se sobreestimen a sí mismos, con una señalización supuestamente segura y abundante.
El esfuerzo que hay que realizar para subir a la montaña vale la pena. Y cuando afortunadamente el velo de la niebla se disuelve en el momento adecuado para que se pueda disfrutar desde la cima de una hermosa vista panorámica de la bahía de Brodick, mejor todavía. «We did it» (lo hemos logrado). El ambiente es cada vez mejor.
Un cambio de isla, un cambio del escenario, un cambio del estado de ánimo. En Lock Gruinart, en el noroeste de Islay, Emily Platt, de la Royal Society for the Protection of Birds (Sociedad Real para la Protección de Aves), no sólo vigila la reserva natural de 1.700 hectáreas, sino sobre todo a los innumerables pájaros que anidan o invernan en el parque nacional.
Entre los visitantes humanos más bien escasos hay ornitólogos y turistas que caminan por senderos naturales para disfrutar del increíble silencio o escuchar el canto del cuclillo. Emily Platt no sabe por qué este lugar tiene un ambiente tan especial. «Nosotros hacemos exactamente lo mismo lo que la gente ha hecho durante siglos. Vivimos dentro del ciclo de la naturaleza«.
Volvemos a Arran. Por una cuestión de amor, Ann Hume vino aquí hace tres años desde la Escocia continental y se estableció en esta isla. «Es imposible estar más cerca de la naturaleza y más cerca de la gente«, dice la ex profesora. ¿No tiene nostalgia de su anterior vida y de su entorno de antes? «En absoluto«, dice.
INFORMACIÓN BÁSICA
- Frente a las costas oeste y norte de Escocia hay muchas islas muy diferentes. La vida cotidiana de los habitantes de las islas está dominada por la llegada y salida de los transbordadores. Los ferries de Caledonian MacBrayne se dirigen a 24 destinos frente a la costa occidental de Escocia y en el fiordo de Clyde. Los llamados hopscotch tickets son billetes flexibles que ofrecen 25 opciones y tienen una validez de un mes a contar desde el primer día de excursión. (www.calmac.co.uk).
- Desde muchas ciudades europeas hay vuelos directos a Edimburgo y Glasgow. Desde la Europa continental hay conexiones de ferry entre Ámsterdam y Newcastle y entre Zeebrugge (Bélgica) y Rotterdam y Hull (norte de Inglaterra).
- Web: http://international.visitscotland.com
No existe la Escocia Continental, chicos… queda en una isla y hay una isla más chica, pero no hay Escocia Continental.