Somuncurá, tesoro natural de la Patagonia y una de las elevaciones más antiguas del Planeta
Protegida como área natural de belleza incomparable, ofrece salidas de trekking, pinturas rupestres y avistajes de una exclusiva flora y fauna.
Bajo protección desde 1993, esta altiplanicie basáltica se sitúa entre las provincias argentinas de Río Negro y Chubut. Foto: Agencia Tur Noticias [ Ver fotogalería ]
Fuente: Agencia Tur Noticias
Lagunas temporarias, conos volcánicos y cerros que alcanzan los 1900 metros de altura, componen la geografía de la Meseta de Somuncurá. Un destino imperdible que se encuentra en el ingreso a la Patagonia argentina, justo en el límite de las provincias de Río Negro y Chubut, con una mayor extensión sobre la zona centro sur de la primera de ellas.
Reconocida como una de las elevaciones más antiguas del planeta, en tiempos pasados esta altiplanicie basáltica fue cubierta en varias oportunidades por el mar. Esta condición generó que el terreno tomara características particulares. Durante las caminatas por la zona se aprecian restos fósiles de fauna marina y bosques de coníferas petrificadas.
En la zona, existen dos empresas que prestan servicios al viajero curioso que decide hacer una parada en estas tierras patagónicas. Las excursiones combinan actividades a caballo, safaris fotográficos, salidas de trekking con diversos grados de dificultad y la posibilidad de acampar en el lugar.
BAJO PROTECCIÓN
La meseta de Somuncurá es una formación integrada por varios cañadones, que en esas tierras toman el nombre de “rincones”. Por estas áreas, descienden los numerosos arroyos que la circundan. Se trata de los mismos cursos que durante los taludes formaron golfos, cabos y bahías, actualmente secos.
El interés geomorfológico, geológico, climático, biológico y ecológico llevó a la meseta a convertirse desde 1993 en una Reserva Provincial, de acuerdo a la Ley de Áreas Naturales Protegidas. El sitio despierta no sólo la curiosidad de biólogos y científicos, sino que también se convirtió en uno de los circuitos de ecoturismo más visitados en la provincia de Río Negro. Y es que entre sus riquezas naturales alberga especies endémicas vegetales, así como animales de características únicas.
Una de las especies faunísticas más reconocidas en la Meseta de Somuncurá es la “mojarra desnuda”. Un pez que carece de escamas y es autóctono de la región. De acuerdo a estudios científicos, es imposible su supervivencia fuera de este hábitat. También en esta Reserva Provincial se avistan lagartijas de roca, la rana de Somuncurá, algunas subespecies de piche patagónico y el denominado pilquín o chinchillón.
SUS ANTIGUOS POBLADORES, LOS MAPUCHES
La denominación de esta meseta en lengua mapuche significa “piedra que habla o suena”. Este nombre se relaciona -de acuerdo a las explicaciones de los lugareños- con el sonido de las rocas al chocar el viento.
Las pinturas rupestres y tallados en roca distribuidos en su inmensa extensión, demuestran que en tiempos pasados, estas tierras patagónicas -hoy totalmente despobladas y sin carreteras- fueron habitadas por diversas comunidades aborígenes.
Los parajes más cercanos, que se erigen en la periferia de la Meseta de Somuncurá, son Aguada Cecilio, Chipauquil, Cona Niyeu, El Caín, Gan Gan, Los Menucos, Maquinchao, Ministro Ramos Mexía, Rincón Treneta, Sanjón Yaminué, Telsen y Valcheta.
Se estima que el total de la superficie que abarca la Meseta de Somuncurá es equivalente a la provincia argentina de Tucumán, con más de 25 km². Para cruzarla de este a oeste son poco más de 300 kilómetros, y alrededor de 200 la extensión de norte a sur.
Una de las particularidades de esta altiplanicie, es que en la superficie todavía se aprecian las bocas de los volcanes que arrojaron su lava hace miles de años, y elevaron la meseta unos 700 metros por encima del resto del territorio circundante.
INFRAESTRUCTURA Y SERVICIOS
El destino turístico más cercano a la Meseta de Somuncurá es Sierra Grande, a la que se accede por RP 5 en dirección este o por RN 3 en caso de venir desde Buenos Aires. Sierra Grande es un lugar de paso obligado en dirección a la Patagonia más austral, que se hizo famoso por sus expediciones a una antigua mina de hierro.
Rodeada de montañas, la ciudad combina circuitos de trekking, rapel, tirolesa y escalada. También promueve actividades náuticas, entre canotaje, windsurf o kitesurf, así como mountain bike, cabalgatas y hasta vuelos en parapente.
Desprovistos en los 90 del principal ingreso económico, que eran las minas de hierro más importantes de Sudamérica, los pobladores de Sierra Grande transformaron la antigua mina en un emprendimiento turístico. Ofrecen visitas guiadas todos los días, de 9 a 17. Y brindan al viajero cascos, linternas y ropa acorde para hacer el recorrido que desemboca en un río interno, desde donde se continúa en balsa. En el mismo lugar, está también el Museo Minero.
Travesía playera. A unos 28 kilómetros de Sierra Grande, a través de la RP 5, el viajero encuentra Playas Doradas. Un destino para el relax, con una completa oferta hotelera, campings, casas de alquiler y restaurantes. Se trata de un balneario natural en el que se practican deportes náuticos y pesca deportiva.
Playas de piedras y aguas bellísimas. Unos kilómetros más al sur, otro de los destinos obligados lo constituye Puerto Lobos, situado sobre el Golfo San Matías, en el límite de las provincias de Chubut y Río Negro. Es un antiguo poblado del que sólo quedan las ruinas de un viejo hotel. El verdadero atractivo, es una extensa playa colmada de piedras, a orillas de un mar turquesa que invita a la pesca y el submarinismo.
Las Grutas. A unas pocas horas de la Meseta de Somuncurá uno de los centros turísticos por excelencia de la provincia de Río Negro lo constituye Las Grutas, también sobre el Golfo San Matías. Allí, el viajero encuentra playas con suaves declives, acantilados y las aguas más cálidas de la Costa argentina. Como excursión alternativa, unos 15 kilómetros al sur de Las Grutas, está El Sótano, con abruptos acantilados desde donde se pesca y recolectan pulpos; y, el Cañadón de las Ostras, un yacimiento milenario de ostras fosilizadas y cristalizadas.
Cómo llegar. Las conexiones áreas desde Buenos Aires son a Viedma (capital de Río Negro) desde U$S 275; o, a Trelew (Chubut) desde U$S 350. El camino hasta la Meseta de Somuncurá se hace vía terrestre. En auto, la distancia desde Buenos Aires a Sierra Grande es de 1161 kilómetros y el costo total sería alrededor de U$S 170. El mejor acceso a la Meseta de Somuncurá es a través de Sierra Grande. En caso de venir desde Viedma (Río Negro) la distancia es de 275 kilómetros y la vía que debe transitar es la RN 3. Si el viaje se realiza desde Puerto Madryn (Chubut) la distancia es de 130 kilómetros y la ruta es la misma pero hacia el norte.
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Que quede claro. No es tierra de MAPUCHES! Es tierra de Tehuelches y Pampas. El MAPUCHE es el invasor Araucano, que en 1833 con la invasión de Namuncurá y la muerte de miles de originarios Tehuelches toman la denominación de MAPUCHES.
igualmente, chilenos, argentinos hicieron nuestra tierra, fuimos civilizados por europeos y perdimos la entidad. Cuanto conocimiento desperdiciado…cuanto historia desconocida…
Al final de cuentas el origen fue de ellos, sin tanta fronteras y pasaportes. Luchemos por mantener las etnias en su ganado respeto.
Correcto lo de Alejandro a quien felicito. Los mapuches son chilenos y yo no olvido y recuerdo siempre a Malvinas, y la ayuda que les dieron a los piratas, de como pintaron los aviones como de chile, y mil cosas mas. Argentinos, no olvidemos y tengamos una lectura clara de quienes son los mapuches.
Buenas noches….hoy vimos a orillas del rio rio gallgos, en un paraje llamado palermo aike una rana se somuncura, lo que nos llamo notablemente la atencion, debido a que creiamos no haber este tipo de animalitos en zonas tan australes. Podra deberse a el cambio climatico o algun factor del azar meramente? Agradeceriamos algun comentario al respecto. Muchas gracias.