FOTOGALERÍA / SAN VALENTÍN

Diez destinos y un día de amor

Viajar es un placer que se duplica en pareja. Y si bien los destinos no hacen al amor, hay lugares que lo estimulan.

París suele considerarse una meca del romanticismo, pero no es la única. Venecia seduce con paseos en góndola con serenata y cena por € 160 por pareja. El hotel Cipriani ofrece la posibilidad de recibir una bendición matrimonial sobre una góndola. Al atardecer, nada como disfrutar un Bellini, cóctel con Prosecco y jugo de durazno, en La Serenísima.

También en el Viejo Continente, un casco histórico con calles adoquinadas, un antiguo puente y un castillo de película en la cima del monte Königstuhl hacen de Heidelberg el lugar más romántico de Alemania. Los amantes hallarán irresistible la vidriera de The Heidelberger Student Kiss, una pintoresca chocolatería que envuelve sus dulces en un packaging con dibujos de enamorados.

La isla de Rodas fue uno de los principales bastiones en la antigua Grecia y hoy es un reducto para distenderse en sus playas doradas, valles verdes y un área medieval declarada Patrimonio de la Humanidad. En el este de la isla, la villa de Lindos conserva su Acrópolis y un tradicional pueblo helénico, de casas blancas, iglesias bizantinas y callecitas empedradas. El Atrium Palace Thalasso Spa Resort & Villas dispone de cuartos con piscina privada desde € 190.

Papeete, Moorea y Bora Bora, en la Polinesia francesa, encarnan la idea del paraíso en la Tierra. Collares de flores de bienvenida, extensas superficies de arena ultrablanca y una gran riqueza subacuática bajo el mar turquesa aguardan en esa porción del Pacífico. La mayoría de los hoteles están concebidos especialmente para parejas. Una habitación cuesta desde $ 2.230 por noche.

Con una temperatura promedio anual de 30 ºC, Bali, Indonesia, resulta un plan perfecto para quienes combinan el mar con la espiritualidad oriental. Si bien es una pequeña isla, hay más de diez mil templos, de allí su apodo de  isla de los dioses”. Las tarifas son más acomodadas respecto de otros destinos: dormir en un cuatro estrellas arranca en $ 380  por noche.

Bellezas americanas

En la región central de México, a tres horas del DF, San Miguel de Allende tiene fama de ser una de las ciudades más bonitas del país gracias a su conservada arquitectura barroca. Su atmósfera bohemia se aprecia mejor caminando el centro histórico, poblado de tiendas de artesanías, galerías de arte y restaurantes. Lujosos hoteles boutique con spa, como Casa de Sierra Nevada o Rosewood, constituyen refugios para vivir el amor en la ciudad natal de Pedro Vargas.

Descubierta por Cristóbal Colón en 1493, St. Barth es una de las islas más exclusivas del Caribe, elegida por el jet set mundial. Su capital, Gustavia, destila el espíritu y el glamour del sur de Francia, con refinados negocios libres de impuestos y gastronomía gala y antillana. En el contorno de la isla se despliegan 14 playas para broncearse o realizar deportes náuticos.

A 166 km de Río de Janeiro, Angra dos Reis deleita con más de dos mil playas y 365 islas. Ilha Grande, la mayor, cautiva con bellas ensenadas, cascadas y áreas de buceo. Otros puntos de aguas cristalinas son las islas Cataguás, Gipóia, Itanhangá, Paquetá y São João. Para sumar encanto al viaje, se puede arribar en yate desde Río. A nivel nacional, también existen sobrados sitios para disfrutar de a dos.

En la Patagonia, Villa La Angostura brinda a los enamorados varios rincones de relax. La ruta de los Siete Lagos con sus paseos lacustres, los miradores al Nahuel Huapi y el  Bosque de Arrayanes, el único arrayanal arbóreo del mundo que puede visitarse, ensamblan a la perfección con la sofisticada oferta de gastronomía y alojamiento.

En el centro del país, a 96 km de Córdoba capital, La Cumbre es una de las ciudades más románticas, apta para las apacibles caminatas serranas, las cabalgatas diurnas y nocturnas y los vuelos en parapente, si aún queda pila.

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