MÉXICO | TRAS LA HUELLA DE FRIDA KHALO

La casa que habla

La casa-museo de Frida Kahlo es testimonio vivo de la atormentada vida de la pintora. Una emotiva colección de su objetos personales. Galería

DESAFIANTE. Hija de madre mexicana y de padre alemán, se casó dos veces con Diego Rivera y fue amante de Leon Trotsky. [ Ver fotogalería ]

Ficha

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Cuánto tiempo ir: días

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Por Milagros Belgrano Rawson (*)

La Casa Azul fue el hogar de Frida Kahlo (1907-1954). Aquí nació, creció, pintó, amó, sufrió y murió. Entre estas paredes, la mayor pintora latinoamericana forjó su mundo y su espíritu creador. Ubicada en la pintoresca colonia defeña del Carmen, en Coyoacán, esta casona se mantiene como testimonio no sólo de la vida de la artista mexicana, sino también de una época fundamental para la cultura de ese país. No es casual que a pocas cuadras se encuentre el museo León Trotsky, con el que Frida tuvo un breve affaire.

Parte de la fascinación por el arte de Kahlo se vincula con su personalidad, independiente y franca, y su apasionada vida durante el México posrevolucionario. Frida se relacionó con varias figuras artísticas y políticas de la época, como Tina Modotti, André Breton, José Clemente Orozco y David Alfaro de Siqueiros, además de Diego Rivera, su marido. A diferencia del arte de muralistas como Siqueiros o del propio Rivera, el arte de Kahlo se destaca por la admiración, casi de culto, que se ha ganado incluso fuera de los círculos artísticos.

Frida nació en la Casa Azul, una casona ubicada en Londres 44, esquina Allende, al sur del Distrito Federal. Allí vivió con sus padres, Matilde Calderón, mexicana, y Carl Wilhelm Kahlo, alemán nacionalizado mexicano, y sus tres hermanas. En 1927 se casó con Diego Rivera, veinte años mayor que ella, y a los dos años la pareja se instaló en la Casa Azul, donde vivirían hasta la muerte de la pintora, en 1954. El matrimonio fue tormentoso: cansada de las infidelidades de su esposo, Frida tuvo amoríos con hombres y mujeres y terminaron divorciándose, aunque en 1940 volvieron a casarse.

La Casa Azul es un fiel reflejo de la apasionada vida de la artista, a través de objetos personales, muebles, fotos y pinturas. Allí pueden verse su cama, testimonio doloroso del vía crucis que fue su vida a causa de un accidente a los 19 años. Su pelvis, columna y pierna fueron destruidas en un choque en un tranvía.

Nunca pudo tener hijos y los últimos años los pasó postrada. En su cuarto también se exhiben los corsets de yeso que utilizaba para mantenerse erguida y que fueron motivo frecuente de sus pinturas, con una columna griega rota representando su maltrecha columna y coronas de espinas en el cuello.

En su amplia cocina se filmaron varias escenas de la película Frida, naturaleza viva, dirigida por Paul Leduc. Allí y en el comedor, se puede admirar la enorme colección de arte popular mexicano que ella y Diego Rivera atesoraban: ollas de mole, tazas, cántaros, muñecos y catrinas –calaveras con sombrero que conmemoran el Día de los Muertos.

Los sombreros de Frida, sus portarretratos, pinceles, libros, silla de ruedas, bastones y radiografías están también a la vista de los visitantes que, conmovidos por la vitalidad de la artista, recorren en silencio cada rincón de esta casa que guarda esbozos de una vida cuya intensidad es difícil de narrar y que merece ser vivida en primera persona, para sentir la corriente eléctrica que aún emana la personalidad que la animó.

Para llegar a Londres 44, en el barrio de Coyoacán, conviene tomar el metro y elegir por alguna de las dos estaciones más cercanas: Coyoacán o General Anaya. La casa museo sólo abre de martes a domingo de 10 a 18 horas y hay visitas guiadas diurnas de martes a viernes. La gran sorpresa es que también se pueden tomar visitas guiadas nocturnas, que son dramatizaciones, pero sólo se hacen de martes a jueves. Se puede solicitar informes y hacer reservas en la dirección de e-mail: [email protected].

Para aprovechar el resto del día por la zona, se recomienda ir al museo Casa de León Trotsky (Churubusco 410, también en Coyoacán). Abre de martes a domingo de 10 a 17 horas, entrada 40 pesos mexicanos (3 dólares). Hay visitas guiadas gratuitas.

 

(*) Nota publicada en el Diario PERFIL el sábado 12 de mayo de 2012

 

Un comentario en “La casa que habla

  1. alberto ruiz | 26/05/2012 | 23:56

    Gente, el nombre original va en idioma inglés : FREDA, ( de alfreda)… se pronuncia en idioma inglés FRIDA.
    f Capishe ?

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