La intimidad de la cocina de un crucero
El cheff de uno de los cruceros más importantes del mundo habla sobre su papel para que los pasajeros vivan un viaje inolvidable. Vea el video.
La gastronomía es uno de los servicios más explorados por los turistas. Cualquiera que conoce un nuevo lugar investiga también la comida local. Pero cuando la idea es viajar en un crucero, con gente de distintos países y costumbres, la experiencia culinaria es diferente.
Carlos Mini es el chef del Grand Celebration, uno de los barcos de la firma Ibero del Grupo Costa. En diálogo con Perfil.com cuenta cómo es la intimidad de la cocina del barco y cómo hace para satisfacer los gustos de los pasajeros.
«La gastronomía a bordo tiene una base en la cocina internacional mediterránea pero también jugamos con los productos locales y con la creatividad», señala Mini.
Los números de la cocina son asombrosos. Sólo para el desayuno diario del crucero, con todos los pasajeros a bordo, se necesitan unos 400 huevos, 400 kilos de harinas sólo para el pan, 400 litros de leche (sin contar la necesaria para la repostería o la cocina). Para el almuerzo y la cena, se utilizan unos 300 litros de aceites, 400 kilos de arroz y 500 kilos de papa.
«El trabajo aquí es muy intenso. A veces le damos de comer a unas mil personas en 45 minutos», explica Mini que si bien extraña a su familia disfruta de trabajo a bordo. Vea el video.
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