SALTA / TREN A LAS NUBES

Un tren para tocar el cielo

Por Darío Silva D`Andrea / Twitter: @DariusBaires

Cuando el Trasandino del Norte salió por primera vez en la estación del Ferrocarril General Belgrano, de la provincia de Salta, allá por 1948, los pasajeros eran una carga adicional para una línea pensada para transportar alimentos y materiales a las minas del desierto de Atacama, en Chile. El tren circulaba a unos 14 km por hora en una ruta de 901 km hasta el puerto chileno de Antofagasta, con un cambio de trenes en la glacial frontera de Socompa (a 3.866 metros sobre el nivel del mar).

El nombre de «Tren a las Nubes» (Fotos) se debe a un filme en colores, realizado por dos camarógrafos tucumanos -estudiantes de la Universidad Nacional- a principios de la década del ’60, que hicieron en tren el tramo Salta-Socompa, que salía de la Estación Salta los días jueves a horas 11.05.

Los camarógrafos lograron que el maquinista hiciera una descarga lateral de vapor cuando la formación llegara al viaducto La Polvorilla, de forma tal que ellos pudieran filmarlo desde las ventanillas de los vagones. El vapor liberado por la máquina, a consecuencia de la baja temperatura del lugar, no se disipó rápidamente y quedó flotando por unos momentos en el firmamento puneño, lo que facilitó la filmación.

 

El trabajo posteriormente fue ofrecido al Ferrocarril, quien luego de adquirirlo lo cedió al periodista del diario Clarín, Emilio Petcoff, a los fines que hiciera el guión del documental. Petcoff, al observar la filmación, se vio atraído por el chorro de vapor que la máquina exhaló y tituló al trabajo «Tren a las Nubes». Posteriormente Ferrocarriles Argentinos adoptó este nombre para el único emprendimiento turístico que en ese momento tenía en el país, y que recorría 240 kilómetros sobre el Ramal C 14, Salta-Antofagasta.

En la actualidad, los amantes del tren pueden pasear «Tren a las Nubes» desde la ciudad de Salta. Va serpenteando un terreno demasiado accidentado para ir recto hasta San Antonio de los Cobres. Finalmente, el tren circula por el impresionante Viaducto La Polvorilla, que salva un abismo de 224 metros, 63 metros por encima de la yerma puna.

Aunque su nombre sea discutible (pues no suelen verse nubes en los cielos del altiplano), el viaje deja sin aliento a cualquiera de sus pasajeros. Casi literalmente, porque se ofrece oxígeno a todo el que pueda necesitarlo cuando se superan los 4.200 metros de altura. Y debido a que el tren actual no lleva mercancías, alcanza una velocidad de 35 km/h en un recorrido que, aun así, dura desde el amanecer hasta la medianoche.

 

DATA

• El tren asciende hasta los 4.200 metros de altura, siendo de los tres ferrocarriles más altos del mundo.
• Recorre 434 km (ida y vuelta) en casi quince horas. Atraviesa 29 puentes, 21 túneles, 13 viaductos, 2 rulos y 2 zigzags.
• El tren cuenta con servicios tales como coche comedor, consultorio médico, audio, video y guías bilingües.
• El tren parte de la estación General Belgrano, en la ciudad de Salta, a 1.187 metros sobre el nivel del mar.
• Durante todo el recorrido se realizan dos paradas: una, en la estación de San Antonio de los Cobres, y la otra, en el viaducto La Polvorilla, donde finaliza.
• Cuenta con servicio de comedor a bordo, un ayudante por vagón, personal de seguridad y asistencia médica por los problemas que pudiera ocasionar en algunos pasajeros la falta de oxígeno que provoca la altura.

 

Conocé el Tren a las Nubes en esta fotogalería

 

Más información en el sitio web oficial del tren: http://www.trenalasnubes.com.ar/ Video: Ministerio de Turismo de la Nación.