costa sur de Inglaterra
Un viaje a la mágica tierra Dorset entre acantilados, castillos y literatura
Las apasionadas novelas victorianas del británico Thomas Hardy despertaron el interés turístico por Dorset, poblado de fósiles, acantilados y castillos.
La costa jurásica inglesa abarca 150 kilómetros al sudoeste del Reino Unido. Allí hay fósiles de 185 millones de años y es el escenario romántico que el escritor Thomas Hardy inmortalizó en varias obras. Foto: New York Times/PERFIL [ Ver fotogalería ]
Por David Shaftel (New York Times/Travel / Diario PERFIL)
Fue en Lulwind Cove, una entrada en la costa sur de Inglaterra, donde el cobarde Sargento Troy tomó un baño improvisado en Lejos del mundanal ruido, la novela de Thomas Hardy de 1874 sobre una poco común mujer victoriana y sus pretendientes. El agua en la ensenada era “suave como un estanque”, escribió Hardy, hasta que Troy “nadó entre las dos estribaciones rocosas salientes que forman los pilares de Hércules a este Mediterráneo en miniatura”, donde fue arrastrado por el mar y presuntamente se ahogó.
Una noche de verano, mi esposa y yo caminábamos la arcilla cubierta de hierba de la ensenada. El lugar en realidad se llama Lulworth Cove y es una bahía con una extraña forma de abanico creada por la erosión de los acantilados. It y Durdle Door son los puntos distintivos de la Costa Jurásica, un tramo de unos 150 kilómetros de costa donde las formaciones rocosas y fósiles evidencian 185 millones de años de historia geológica.
Aunque estábamos en el condado de Dorset, Hardy llamaba a esta parte de Inglaterra “Wessex”, por su nombre sajón. Lo describió como un campo “en parte real y en parte de ensueño”. Es una región tan inseparable de Hardy como el Mississippi de William Faulkner. El término “momento de suspenso” (cliffhanger, lo que en inglés significa literalmente “colgar de un acantilado”), de hecho, se dice que se originó con Hardy, después de que dejara a uno de sus personajes colgando de un acantilado en Wessex, al final de un capítulo.
Aunque “la tierra de Hardy” está salpicada de iglesias, mercados y pueblos de las novelas del autor, yo estaba interesado en los paisajes con ovejas, las tierras cultivadas y las rutas romanas que terminan abruptamente en espectaculares acantilados junto al mar. Dorset ganó el estatus de Patrimonio Mundial de la Unesco en 2001, ayudado por la Costa Jurásica.
Nos establecimos en Bridport –“Port Bredy” según Hardy–. La prensa británica llama a Bridport el Notting Hill del Mar por sus boutiques y restaurantes de buen gusto. “Siempre hay un personaje extra en todas las novelas de Hardy, y ése es el campo”, dijo Mike Nixon, secretario de la Sociedad Thomas Hardy. “Hardy fue el primer oficial de turismo de Dorset”.
Hijo de un constructor y una ex empleada doméstica, nació en Higher Bockhampton, al este de Dorchester, la sede del condado. En 1885, después de un período nómada que incluyó una temporada como arquitecto en Londres, se instaló en Dorchester en Max Gate, una sencilla casa de ladrillos que diseñó él mismo.
Calvo y de bigote gris, él no se parecía en nada a los apuestos hombres de sus novelas. Se casó dos veces y nunca tuvo hijos y, al enviudar, se casó con una mujer muy joven. Vivió en Max Gate hasta su muerte en 1928. Max Gate y la cabaña con techo de paja en que había nacido ahora son reconocidos lugares de interés turístico.
El estudio del autor, sin embargo, se ha montado en el ala Hardy del Museo del Condado de Dorset, en Dorchester. Empezamos en Dorchester, una ciudad de 20 mil habitantes que creció sobre un asentamiento romano y aparece como “Casterbridge” en varias novelas.
Al suroeste de Dorchester está Maiden Castle, los restos de las 20 hectáreas del Fuerte de la Edad de Hierro. Se puede ver Beaminster –“Emminster”, “la pequeña ciudad rodeada de colinas” de Hardy en Tess– y el cercano Mapperton Estate, donde se filmaron escenas de la nueva película de Fox Searchlight de Lejos del mundanal ruido, en la casa de estilo isabelino de encantadores jardines aterrazados.
Luego manejamos hasta Cerne Abbas, un pueblo que surgió en torno a una abadía benedictina en el siglo X, cuya versión aparece en The Woodlanders y Tess. En Bere Regis está la tumba de Turberville, la “antigua y caballeresca” familia en la que Hardy dio forma a d’Urberville en su novela más famosa.
La iglesia estaba vacía y abierta la enorme puerta de madera. Con un texto desgastado en latín, la lápida decía que los de la familia de Robert Turberville, que murió en 1559, “habían sido los señores de la casa desde tiempos antiguos”. Comimos sándwiches debajo de la famosa ventana con los emblemas heráldicos de los Turberville. Y fuimos unos minutos los señores de la mansión.