Placeres con «P» de Parma
Además de haber sido nombrada por la Unesco Capital Creativa para la Gastronomía, la ciudad natal de Giuseppe Verdi tiene las pinturas de Correggio y el imponente Teatro Regio.
Además de haber sido nombrada por la Unesco Capital Creativa para la Gastronomía, la ciudad natal de Giuseppe Verdi tiene las pinturas de Correggio y el imponente Teatro Regio. [ Ver fotogalería ]
Por Seth Sherwood (*)
Sinónimo del jamón de Parma, el queso parmesano, el vino Lambrusco, la empresa de pastas Barilla y la escuela de cocina Alma, Parma, en el norte de Italia, fue nombrada el año pasado por la Unesco como Ciudad Creativa para la Gastronomía, la primera urbe de Italia que recibe este honor. Pero la ciudad, que fue lugar de residencia de talentos tan diversos como el pintor renacentista Correggio y el director de orquesta del siglo XX Arturo Toscanini, también fomenta otros apetitos –religiosos, artísticos, teatrales, musicales, históricos– por su riqueza de iglesias y monasterios ornamentados, un excelente museo de bellas artes, y un celebrado teatro.
Giuseppe Verdi, el compositor de óperas del siglo XIX, fue otro nativo de la región de Parma, y el Festival Verdi de otoño, celebrado en el dorado Teatro Regio del siglo XIX, es la gala musical anual. La programación durante el resto del año también es impresionante, y comprende todo tipo de cosas, desde ópera y ballet hasta jazz y danza experimental. Para echar un vistazo a su opulento interior –famoso por su techo pintado, telón como tapiz, gradas en arcadas y enorme candelabro francés– puede tomar un recorrido guiado de 30 minutos (5 euros), disponible en las mañanas y en las tardes.
El gentío en Strada Matteo Renato Imbriani, junto a los arcos de piedra de la iglesia Santissima Annunziata, no está celebrando la alegría de la templanza. Al contrario. El mercado matutino es un emporio para los placeres. ¿Tiene un techo que necesite pintar? Hable con Correggio. Ese parecía ser el lema en Parma a principios del siglo XVI; al menos entre las autoridades religiosas. En la Camera di San Paolo, parte de un convento benedictino, Correggio adornó el techo abovedado y las paredes de piedra con querubines y la diosa griega Diana.
La iglesia de San Giovanni Evangelista muestra a un San Juan con barba blanca flotando en un ardiente cielo rojo. La Cattedrale di Santa Maria Assunta, que tiene el interior más altamente decorado de las iglesias de Parma, también presume una cúpula de Correggio, con La Asunción de la Virgen. Como un Louvre local, el complejo del Palazzo della Pilotta es un ex palacio que alberga museos dedicados al arte y la arqueología. Se entra por el Teatro Farnese. La Galleria Nazionale incluye obras de la escuela florentina, paisajes urbanos bañados de dorado del Canalletto de Venecia, y La Scapiliata, el dibujo de Da Vinci de la cara de una joven. Múltiples salas están dedicadas a obras de Correggio, con el escalofriante y nocturno La lamentación de Cristo como broche de oro.
(*) The New York Times / Travel. Publicado por Diario PERFIL