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Música clásica y vinos: el combo ideal para el otoño mendocino
Viñedos, bodegas, iglesias y museos de la provincia abrirán sus puertas para celebrar la 17° edición del festival «Música Clásica por los Caminos del Vino».
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Las exclusivas bodegas y extensos viñedos de la Provincia de Mendoza, al pie de la Cordillera de los Andes, se unirán nuevamente este otoño para deleitar a los turistas con la nueva edición del festival internacional “Música Clásica por los Caminos del Vino”. Durante una semana, del 9 al 16 de abril, una serie de destacados intérpretes locales, nacionales e internacionales desplegarán su talento en escenarios situados en bodegas, capillas, iglesias, sitios patrimoniales y turísticos de gran parte del territorio mendocino.
Tradicionalmente, Mendoza tiene una buena cantidad de visitantes para Semana Santa y se espera que este año no sea la excepción. El Secretario de Cultura de la provincia, Diego Gareca destacó la importancia que ha tomado el Festival a lo largo de los últimos años: “cuando los festivales se sostienen en el tiempo, empiezan a convertirse en clásicos para la provincia. Música Clásica tiene ese condimento, han pasado cuatro gobiernos de distinto color político y se ha seguido sosteniendo”.
La provincia de Mendoza, a la par de Melbourne en Australia, Bordeaux en Francia y Florencia en Italia, es una de las capitales mundiales del vino, por la destacada calidad de sus uvas. En sus bondadosas tierras soleadas existen más de 1.200 bodegas, muchas de las cuales abren sus puertas al visitante para contarles la historia y los procesos que rodean esta bebida, que se convirtió en una “embajadora” del país.
“Los Caminos del Vino” mendocinos constituyen una ruta turística temática en la que grandes y pequeñas empresas familiares ofrecen a los turistas visitas guiadas, cursos de cata, degustaciones especiales y la posibilidad de cosechar durante la mística vendimia. Esta provincia es una ruta para maridar la “bebida nacional” con paisajes de imponente belleza natural.
El gran crecimiento del sector generó también que importantes fincas rurales decidieran ampliar sus instalaciones para ofrecer al turista un mejor y más completo servicio. Algunas disponen de hoteles exclusivos en las mismas viñas, como nueva alternativa ofrecen la vinoterapia, y a los recorridos básicos se suman museos, cavas con exposiciones de arte, almuerzos al aire libre junto a expertos enólogos, cabalgatas, circuitos de mountain bike y especiales cenas entre barricas de roble.
Con la elaboración de casi 10 millones de hectolitros de vino al año, Mendoza es en el centro vitivinícola más importante de Sudamérica. Hay empresas que trabajan con la más alta tecnología, y pequeños viñedos atendidos por sus dueños, dedicados a la fabricación artesanal. Los departamentos de Luján de Cuyo, Godoy Cruz y Maipú -cercanos a la ciudad Capital-, poseen la mayor cantidad de bodegas abiertas al público. Además, la provincia produce Malbec (en la Zona Alta del río Mendoza), vinos blancos frutados y tintos jóvenes (en el Norte) y espumantes (en San Rafael).
EL DATO. El Festival mantiene su carácter solidario, por lo que se entregan entradas gratuitas a cambio de elementos que son destinados a instituciones de bien público. El canje se realiza en la Secretaría de Cultura (Av. España y Gutiérrez, de la capital mendocina) y en diferentes municipios de la provincia en los días previos al festival. (cultura.mendoza.gov.ar)