MONARQUÍA ULTRACONSERVADORA
Turistas gays y trans son «bienvenidos» en Qatar para el Mundial 2022 pese al tabú
La homosexualidad está prohibida en Qatar y la ley no es precisa en el caso de las personas transgénero.
Uno de los estadios que se utilizarán en la Copa Mundial de 2022 en el emirato de Qatar. FOTO: AFP [ Ver fotogalería ]
Publicado el 27 de septiembre de 2019
Los turistas transgénero y homosexuales serán «bienvenidos» al Mundial de fútbol de 2022 del riquísimo Emirato de Qatar, declaró un responsable de la organización del evento, precisando que las costumbres locales deberán ser respetadas. La homosexualidad está prohibida en Qatar y la ley no es precisa en el caso de las personas transgénero. Ese asunto tabú es raramente abordado en la vida pública o por las autoridades de este emirato conservador del Golfo.
«Debo asegurar a todos los aficionados, sea cual sea su género, su orientación [sexual], su religión o su raza, que Qatar es uno de los países más seguros del mundo y que todos serán bienvenidos aquí», declaró esta semana Naser al Jater, responsable de la organización del Mundial-2022. “La seguridad de todos los aficionados es de gran importancia para nosotros», insistió Al Jater. Sin embargo, advirtió que las «manifestaciones públicas de afecto están desaprobadas», al igual que el «alcohol no forma parte» de la cultura del país.
«Para el Mundial queremos asegurarnos que [el alcohol] sea accesible para los aficionados que vienen del extranjero y quieran tomar una copa», precisó, evocando lugares indicados para ello, además de la decena de hoteles de lujo autorizados a servir bebidas alcohólicas, en los que una pinta de cerveza se acercaría a los diez euros. Según él, «algo más de un millón de aficionados» acudirán al país del Golfo durante el Mundial, el primero organizado por un país árabe y de Oriente Próximo.
La organización de uno de los más importantes eventos deportivos del mundo es un reto mayúsculo para Qatar, en una región sacudida por las tensiones. Por eso, Al Jater indicó que el país tiene la capacidad de «garantizar la seguridad» en la competición, aunque reconoció la «posibilidad de altercados entre aficionados debido al tamaño del país, con numerosos aficionados concentrados en el mismo perímetro», añadió. (AFP)
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