Este país abre su primer cine tras 35 años de prohibición
La primera sala de cine de Arabia Saudita dará paso a la inauguración de toda una serie de salas en todo el país. La empresa AMC tiene previsto inaugurar decenas de cines en los próximos años.
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Nota publicada el 18 de abril de 2018
Arabia Saudita no tiene ningún cine desde hace 35 años. Hasta la fecha, los saudíes viajaban en coche a otros países para poder ir al cine. Pero esta situación cambiará este miércoles (18 de abril) con la inauguración en Riad de una nueva sala en la que se proyectará una película taquillera de Hollywood. El nuevo cine pertenece a la cadena estadounidense AMC pero al evento histórico no podrá asistir ningún ciudadano común, porque tanto la gala como una serie de funciones especiales programadas para este mes están reservadas sólo para privilegiados. Se desconoce la lista de invitados así como la película que se mostrará, aunque los rumores apuntan a que se trata de «Black Panther», la exitosa película de acción del mundo Marvel.
Lo que casi en cualquier otro país es una normalidad, para Arabia Saudita supone todo un punto de inflexión cultural. La monarquía wahabbita prohibió los cines a mediados de los años 80 tras imponerse la tesis conservadora saudí del islam, que prohíbe diversiones como conciertos o las películas. El paso dado en el reino musulmán está en consonancia con las medidas de apertura en el país. A finales de junio en Arabia Saudí se permitirá conducir a las mujeres. Asimismo se están programando más conciertos y también ferias y congresos.
Detrás de estos cambios figura el príncipe heredero Mohammed bin Salman. El joven de 32 años, que recientemente cuestionó el estricto código de vestimenta para las mujeres, representa la esperanza para muchos jóvenes saudíes, que a menudo sueñan con una vida de estándares occidentales. El heredero, al que también se le conoce como «MbS», no sólo impulsa toda una serie de reformas internas, sino también una agresiva política exterior. El príncipe es el responsable de la devastadora escalada de la guerra en Yemen, donde murieron más de 10.000 personas.